Miguel Ángel Marrero: el viaje de regreso a sus raíces

Miguel Ángel Marrero es un joven venezolano de 25 años. Se graduó como Licenciado en Contaduría Pública en la Universidad Metropolitana, en Caracas, Venezuela. En esta misma ciudad nació y creció. Actualmente está trabajando por su cuenta en proyectos personales.
Sí, Miguel tiene ascendencia italiana y, en estos momentos, se encuentra ayudando a su familia con sus planes a futuro. Éstos, «sea por casualidad de la vida o por el destino, serán en Italia».
A continuación, descubrirás más sobre su experiencia con la cultura italiana que le ha acompañado en su crecimiento. También conocerás un poco sobre este viaje que, junto a su familia, lo impulsará de regreso a sus raíces.

Una mirada a la italianidad de la familia de Miguel Ángel Marrero

A pesar de que la cultura italiana siempre ha estado presente en su vida, Marrero comenta que le hubiese gustado que le enseñaran aún más sobre la misma. «Mi mamá y mis tías (…) sí tuvieron la oportunidad de familiarizarse con el idioma italiano desde pequeñas», expresa.

Cuenta que «también tuvieron la posibilidad de conocer Italia y el pueblo donde mis abuelos crecieron». Por su parte, su abuela de vez en cuando le hablaba en italiano pero en muy pocas ocasiones.
«Más allá de probar todas sus comidas deliciosas y escuchar uno que otro cuento de Italia, no tuve la oportunidad de involucrarme más con esa cultura».

¿De qué manera ha vivido esta cultura?

«En nuestra familia fue costumbre realizar grandes comidas, cada cierto tiempo, los domingos», señala Miguel. Creaban estas oportunidades para reunirse todos en familia y saber de cada uno. «Hoy en día no nos vemos tanto como antes, pero siempre que nos vemos, no puede faltar una buena comida», explica.
Una de las tradiciones que Marrero continúa compartiendo junto a su parentela es reunirse en Navidad y Año Nuevo. «Diciembre es un mes especial para la familia porque disfrutamos de todo el ambiente navideño», expresa.
Además, añade: «Al no ser una familia tan grande, siempre fuimos muy unidos (…) simplemente disfrutamos de nuestra compañía».

Miguel Ángel Marrero: Entre dos mundos

Miguel afirma que crecer con las culturas italiana y venezolana presentes, le han hecho ser la persona que es hoy en día. «Le agradezco por igual a mis abuelos maternos por haber llegado desde Italia, como a mis abuelos paternos que nacieron aquí en Venezuela».
«No creo que me identifique con una cultura más que con la otra», comenta, y tampoco «puedo decir que he experimentado un shock cultural», asegura. Además, «si bien mis abuelos son italianos, el resto de mi familia nació en Venezuela». Marrero resalta que en su familia han sido neutrales entre las dos culturas.

Sobre sus raíces…

«Mis abuelos maternos fueron los primeros de mi familia quienes vinieron a Venezuela, hace casi 60 años». Miguel Ángel Marrero comenta que llegaron en un barco proveniente de un pueblo llamado Menfi. Está ubicado al suroeste de Sicilia, no muy lejos de la costa.
Su abuela le contaba que era muy común ir caminando desde el pueblo hasta la playa. «Eran paseos largos en los que iban en grupo, a veces por el camino montañoso o por las vías principales», agrega.
«Ahora que me toca mudarme a Menfi, me genera mucha emoción y nostalgia poder conocer el pueblo donde ella creció», comenta.

¿Un viaje de regreso a su origen?

Así es, Marrero revela que nunca ha tenido la oportunidad de visitar Italia, «hasta ahora que estamos planeando emigrar de regreso, poco a poco, en familia». Cuenta que estuvo recientemente en España y también en Malta por estudios de inglés.

«Tenía planeado conocer Italia pero, debido a la pandemia, tuve que cambiar mis planes», expresa. Además afirma que, luego de mudarse a Menfi, mantener la cultura italiana no será el mayor reto de su familia.
Miguel declara que «el nuevo reto será no olvidar las costumbres que, como venezolanos de familia italiana, creamos y fortalecimos todos estos años juntos».

«Es importante conectar con ese lado de tu familia»

A los jóvenes venezolanos con ascendencia italiana, que se encuentran leyendo esta pequeña parte de la historia familiar de Marrero, él les diría:
«Si no tuviste la oportunidad de involucrarte lo suficiente mientras crecías, no es muy tarde», asegura.
Miguel Ángel Marrero, un joven amable, inteligente y comprometido con cada uno de sus proyectos, culmina con un valioso mensaje. «No hay que dejar a un lado las tradiciones, recuerdos y personas de las cuales tenemos que darle las gracias por estar hoy aquí».