La Escuela Agustín Codazzi es una reconocida casa de estudios para la comunidad italiana, ubicada en la Alta Florida de Caracas, Venezuela. Este colegio no es como cualquier otro debido a la historia que le caracteriza.
En primera instancia, quisimos conocer y comprender la llegada de esta institución al país caribeño. Para ello decidimos conversar con el ‘coordinatore didattico’ (subdirector) y profesor de la Escuela Agustín Codazzi, Leonardo Capaldo.
Además de ser el subdirector, obtuvo el título de historiador en la Universidad Central de Venezuela (UCV). Allí realizó un proyecto de investigación, condecorado con honores, donde trabajó la inmigración italiana en Venezuela alrededor de los años 50 y 70.
¿A qué se debió el proceso migratorio italiano en esa época?
«Normalmente -no quiere decir que todos- los procesos migratorios suceden por índole económica. Europa estaba enfrentando una situación de posguerra, Italia estaba destruída», comenta Capaldo, y añade que el proceso migratorio de mayor auge se da con los italianos provenientes del sur.
Más tarde, al llegar a Venezuela, «se dan cuenta que es una nación que ofrece oportunidades de crecimiento económico, familiar y personal». En ese sentido, los italianos empiezan a fundar diferentes tipos de instituciones que tuvieron un mayor auge en los años 50.
Propósito de la Escuela Agustín Codazzi
Son diversas las instituciones que la comunidad italiana proyectó a largo plazo, entre las cuales destaca la Escuela Agustín Codazzi. El propósito al fundar esta casa de estudios, «era recepcionar a los italianos que llegasen de la guerra para introducirlos en la medida de lo posible a la sociedad venezolana».
Impartiendo, en ese sentido, «materias lingüísticas y culturales en venezolano y todo el currículum italiano. Todo para no perder la esencia con la patria de origen».
¿Tuvo uno o varios fundadores?
Sus fundadores fueron «una colectividad italiana que reunió grandes personalidades en esa época y, entre ellos, se destaca un gran personaje que era Filippo Gagliardi». Este era un constructor italiano que contribuyó en el desarrollo del país. En los años 50 era muy allegado al régimen del General Marcos Pérez Jiménez, el cual se caracterizó por la modificación del espacio físico; Gagliardi contribuyó en gran parte, según comenta Capaldo.
A su vez, Filippo decide donar un terreno en la Av. Las Palmas de la Florida. Luego el Colegio lo toma como forma de pago y adquiere lo que sería la Sede Principal, que es la Quinta Elisa.
Estructura de la Escuela Agustín Codazzi
La Escuela Agustín Codazzi, luego de obtener la primera quinta, «con la prosecución de los años se adquieren dos quintas más y, a finales de los años 90, se integran las tres quintas». Capaldo nos cuenta que este complejo escolar abarca aproximadamente unos 8.000 metros cuadrados.
No es una propiedad tradicional, es decir, heredada por familias. Está escuela pertenece a la colectividad italiana a través de una asociación civil sin fines de lucro.
Adaptación al Sistema Escolar Venezolano
«Después de los años 50, se dan procesos de ampliación de la escuela y ajustes a las nuevas realidades. Por ejemplo, se implementa la lengua inglesa, la informática (…) Es decir, ya esa migración masiva en los años 50 no era la misma en los años 80».
A partir de este hecho, el colegio tuvo que reajustarse e implementar el Sistema Escolar Venezolano. «En el 2004 se adquiere el estatus de ‘Scuola Paritaria’». Esto se refiere a que sigue el mismo estándar, currículum y titulación de las escuelas estatales italianas, según comenta Capaldo.
Autor: Instagram @scuolacodazzi
Hoy, la Escuela Agustín Codazzi continúa con el mismo estatus, solo sufrió un proceso de unificación con el sistema escolar criollo. Hoy por hoy, los estudiantes se gradúan con doble titulación (la venezolana y la italiana).
¿De qué manera han atravesado la pandemia?
Para la Escuela Agustín Codazzi, la situación pandémica surgió como un reto inesperado. Capaldo asegura que se han diseñado nuevas estrategias para continuar con la educación de los estudiantes. «Es algo que de alguna manera a todos nos ha tocado aprender porque nadie estaba preparado para una situación como esta», agregó Capaldo.
«Yo he aprendido que la educación no puede verse con esta magnitud de la distancia (…) Ese calor humano que es fundamental y necesario en el proceso de enseñanza y aprendizaje no se puede cortar tajantemente».
Lo que ha motivado al profesor Leonardo Capaldo
«En la Escuela Agustín Codazzi tengo un poco más de cuatro años, empecé a dar clases cuando tenía 20 años», explicó Capaldo. Lo que le motivó, principalmente, era contribuir y marcar historia dentro de la comunidad italiana. «Como historiador, tengo una visión distinta (…) Vi importante una contribución a la comunidad italiana desde el enfoque que yo podría generar».
Para Leonardo Capaldo es importante reconocer el esfuerzo y el aporte de la colectividad italiana, «y no hay otra manera de reconocerlo sino a través de la reconstrucción histórica de los personajes italianos que contribuyeron a la construcción y la formación de un país».
