El italo venezolano Rafael Salvatore, se ha hecho un nombre de sí mismo por su larga trayectoria en el área cinematográfica en Venezuela. Los orígenes de Salvatore se remontan al municipio de Lavello, en la provincia de Potenza, en Basilicata; es el hijo Mauro Salvatore y María Caterina Bisceglia. Además de trabajar en el séptimo arte, también es reconocido por su trabajo en el mundo del arte y periodismo.
La trayectoria de Rafael Salvatore en Venezuela se puede resumir con un trabajo investigativo exhaustivo, también teniendo un registro audiovisual de su entorno. Por una parte, en el año 1970 formó parte del grupo de investigación Lugar del Arte del Hombre (LAH). Años más tarde, forma parte de la UNESCO, en París, Francia (1973); en aquel entonces Salvatore aprende a revelar negativos y se convierte en corresponsal de un medio noticioso en la capital francesa.
La fotografía como un medio para conectar emociones
El estilo fotográfico de Rafael Salvatore consta de dos tipos de fotografía fija, ambas para el cine venezolano. Gran parte de su trabajo ha capturado las creaciones de Solveig Hoogesteijn, Thaelman Urgelles, Ana Cristina Henríquez, Jacobo Penzo, César Bolívar, Mauricio Walerstein, Livio Quiroz, entre otros cineastas.
En una entrevista para “Cinco8” Rafael Salvatore comparte su amor por la imagen fija. “Es que hay que meterse dentro de las imágenes, no de las películas, porque el cine es, en realidad, una consecuencia de la fotografía. Son veinticuatro fotos fijas que hacen creer que un tipo corre, canta y llora. El foto fija no es uno más del rodaje, sus registros sirven, porque se vuelven una referencia, pero hay que hacer el trabajo con dignidad”.
“Fijaciones Que una Foto Fija”
Una de sus muestras más icónicas fue la exposición “Fijaciones Que una Foto Fija: Homenaje al Cine Nacional”. Esta fue una exhibición que contó con el apoyo de La Fundación Audiovisual Margot Benacerraf, la Fundación Cinemateca Nacional, con la colaboración de la Fundación Fondo Andrés Bello y la Dirección de Cultura.
“La muestra presentó 70 fotografías en blanco y negro realizadas con películas 35 mm y copiadas en papel de fibra, con las que la Fundación Cinemateca Nacional celebró el Centenario Venezolano en 1997, así como algunas impresiones digitales a color, que nos revelan el “detrás de cámara” de numerosas películas venezolanas y extranjeras rodadas en el país”.
Una ojeada a la vida de Rafael Salvatore
Arribó a Venezuela en el año 1979, a Cumaná, Edo. Sucre; en 1990 se mudó a la capital venezolana. Su trabajo abarca el registro de las tradiciones venezolanas, obras autorales y el cine. Su trabajo hace un llamado a la reflexión, nos invita a atravesar la pantalla, a diseccionar la historia y descubrir cómo la realidad construye la ficción.
“Fundó junto a Benito Irady, Elizabeth Hernández y John Dickinson el grupo cinematográfico Nueva Andalucía y realizaron tres documentales sobre personalidades del oriente de Venezuela: Cleto Rojas, un pintor campesino; El diablo de Cumaná, y Cruz Quinal, el rey del bandolín” según reseña Venezuela Historia.
Foto portada: Twitter El Universal