María Antonella Sarli es una joven ítalo-venezolana, parte de la actual generación de relevo del país; psicóloga de profesión y amante de la cultura italiana que se le inculcó desde pequeña. Actualmente tiene 23 años de edad. Durante su infancia y adolescencia estudió en un colegio católico; al graduarse decidió optar por la carrera universitaria de psicología, la cual culminó con honores durante este año. Nació en Caracas, Venezuela, país en el que aún reside. Sin embargo, demuestra mucho arraigo a las costumbres italianas, ya que sus padres son hijos de inmigrantes italianos.
Un vistazo a la familia de María
María nos cuenta que sus familiares provenientes directamente de Italia son sus nonnos por parte de su mamá, que vienen de un pueblo llamado Pescopagano; por otra parte, sus abuelos paternos nacieron en Padula. Con respecto a la cultura italiana que ha recibido, comenta que en su familia, tanto a sus primos como a ella, desde muy pequeños, sus nonnos y papás les han inculcado todas las tradiciones italianas que ya ellos conocían.
«Aunque fue un mix entre las tradiciones de aquí y las de allá, definitivamente la cultura italiana, por lo menos en mi familia, siempre ha sobresalido más», agrega.
¿Cómo fue tu infancia?
«Tengo muy buenos recuerdos de mi infancia, desde muy pequeña me he visto rodeada de la cultura italiana hasta mi actualidad y las tradiciones siempre las hemos mantenido en mi familia, a pesar de las circunstancias del país», comenta. María Antonella asegura que su niñez fue muy alegre y siempre estuvo rodeada de su familia. Su nonna, por parte de mamá específicamente, siempre fue muy especial con ella.
«Lo que más recuerdo son todas las cosas que solía cocinar cuando me provocaba algo o cuando quería consentirme, aunque esto lo sigue haciendo hasta el sol de hoy», añade. Además, comenta que desde pequeños siempre les enseñaron que la familia es lo más importante y que siempre están ahí para apoyarse.
Costumbres que han pasado de generación en generación
María comenta que, junto a su familia, han sabido «continuar con las tradiciones que les enseñaron a mis nonnos». Por ejemplo, la celebración del domingo de pascua, «aquí no es una fiesta tan relevante como lo es en Italia. Nos solemos reunir en familia y almorzar juntos». También han mantenido el tipo de comida que se cocina en la cena de navidad. «Aquí se suele hacer la típica cena navideña venezolana con hallacas, ensalada de gallina, etc», sin embargo, su familia suele comer pasta y pescado.
Otra costumbre importante en su familia son las reuniones que hacen para ver los partidos de fútbol y celebrar juntos a la selección italiana. «El fútbol siempre ha sido algo que nos hace identificarnos y sentirnos parte de la cultura, (…) nos apasiona».
¿Has visitado Italia alguna vez?
«Tristemente no he visitado Italia, sin embargo mis nonnos y mis papás sí me han contado sus experiencias y siempre me ha generado mucha calidez, cuando me hablan de los pueblos de donde vienen y cómo es la gente allá».
María Antonella Sarli asegura que percibe a Italia como un país hogareño y que se siente parte de su cultura a pesar de no haberlo visitado aún. Sin embargo, comenta que conocer Italia es uno de sus grandes sueños, al igual que visitar los lugares de origen de su familia.
¡Shock cultural!
María, siendo una joven proveniente de una familia italiana que ha sido criada en Venezuela, comenta: «Yo me siento muy identificada con las tradiciones venezolanas a pesar de que en mi familia no se siguen tanto». No obstante, cuando le comenta a la gente, por ejemplo, de su cena navideña «no pueden creer que no comamos hallacas el 24». Asegura que sí las comen en otros días, al igual que el pan de jamón, la ensalada de gallina… pero no forma parte de su navidad en sí.
«Igual que el tema familiar, suele ser algo que noto distinto en relación a otras personas, no sé si será la cultura italiana como tal, pero me han dicho que realmente sí solemos darle mucha importancia al vínculo familiar», añade.
¿Cultura venezolana o italiana?
«Ambas han tenido mucha influencia en mi vida, pero sin duda he recibido más herencia en cuanto a la cultura italiana y creo que por eso podría identificarme un poco más con ella que con la venezolana». María comenta que, a pesar de haber nacido en Venezuela y sentirse parte de su país, creció siguiendo tradiciones y fiestas italianas.
Asegura que, en el futuro, «me gustaría que mis hijos vivieran las tradiciones y las fiestas como lo hemos hecho todos en la familia. (…) Aunque la cultura venezolana siempre será parte de mí».
A los jóvenes venezolanos con ascendencia italiana
«Les diría que continúen sus tradiciones familiares, sin dejar a un lado ninguna de las dos culturas. (…) Deberíamos sentirnos orgullosos de quienes somos y lo que nos hace sentir identificados». También añade: «Al final del día, siempre podemos unir ambas partes para hacer algo mejor. En mi caso, siento que eso es lo que me sucede en relación a mi herencia italiana y haber nacido en Venezuela».
Con este mensaje culmina María Antonella Sarli, una joven generosa, dedicada y apasionada por su profesión y motivada por el vínculo genuino hacia su familia, generado gracias a esa cultura italiana que tanto le ha aportado a lo largo de su vida.